Las vajillas son de uso común en las mesas familiares y a menudo se emplean para eventos sociales o conversiones. Muchos compradores no saben exactamente lo que les espera detrás del resultado final, la fina vajilla que ven en los estantes de la tienda. Hay un complejo procedimiento de manufactura industrial implicado para crear un diseño único.
Los fabricantes modernos hacen uso de varias formas artísticas, así como de algunos avances tecnológicos. Esto hace que sea posible duplicar la producción de vajillas, además de crearlas mediante operaciones mecánicas (no manuales). Veamos a continuación el paso a paso del proceso de fabricación a nivel industrial:
La creación de un diseño personalizado se basa en el talento del diseñador, quien diseña un patrón con ideas originales, colores y talento para arts plásticas. El diseñador debe tener un conocimiento profundo de materiales, herramientas, incluso tecnología, que le permita llevar el diseño a la realidad. La etapa inicial se refiere a la creación de una gama de vajillas perfectas para adaptarse a las preferencias modernas.
Una vez que el diseño esté completo, hay dos enfoques disponibles para comenzar el proceso de manufactura. El fabricante tendrá que decidir qué metal o material se usará para fabricar la vajilla. Habitualmente con arcilla que generalmente debe mezclarse con agua para proporcionar una consistencia suave. Luego, se coloca la arcilla en moldes de metal para crear piezas individuales.
Las piezas moldeadas deben tener un acabado profesional. El acabado visual exige también actividades artísticas minuciosas para añadir detalles adicionales. Muchas vajillas incluyen logotipos, letras y otros símbolos artísticos. El personal experto debe trabajar minuciosamente en el objeto para agregar los detalles al objeto una vez que se haya solidificado.
Es necesario un proceso de secado bien dirigido antes de que la arcilla va al horno. Esta operación se conoce como templado y ayuda a que la arcilla sea más fácil de manipular; también ayuda a darle al producto un mejor acabado. Finalmente, la vajilla se prepara para cocinarse dentro del horno. Esto requiere cierto procesado en condiciones muy específicas para asegurar su integridad. El tiempo de cocción depende en gran parte de los materiales utilizados para hacer la vajilla.
Una vez que las piezas se hornean y templadas, se pone en marcha la manipulación mecánica para ensamblar la vajilla. La mezcla de arcillas individuales y el acabado de porcelana de bohemia se redondean con una limpieza mecánica, limpieza química y lijado. Éstos son pasos necesarios antes de llegar a la etapa de empaque. El envasado es el proceso por el cual las piezas se agrupan y preparan para llegar al consumidor, etiquetadas y con sus instrucciones de cuidado correspondientes.
Como hemos visto, la fabricación de vajillas no es un proceso sencillo. El viaje comienza con una idea inspiradora y, para acabar, requiere mucho trabajo durante su creación. A continuación hemos enumerado las principales etapas en las que se divide el proceso:
Durante cada etapa, los fabricantes toman extremadas precauciones, saben que cada paso erróneo puede conducir a resultados débiles y pobres. Al final, esto será entregado al consumidor; por lo tanto, un buen trabajo se requiere en todas las etapas de la manufactura.
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