Alimentación
05 marzo, 2023
El aceite de coco ha emergido como uno de los productos alimenticios más populares en todo el mundo. Se añade a varios platos y es ampliamente utilizado para freír, mezclar y condimentar. Está rico en ácidos grasos, proteínas y vitaminas, haciéndolo ideal para aquellos que buscan una alternativa saludable a otros aceites. Se fabrica mediante diversos procesos, pero el principal procedimiento de fabricación industrial del aceite de coco es el siguiente.
En primer lugar, los frutos de coco maduros se reciben en un área de recepción y someten a un examen minucioso. Se examina minuciosamente la calidad de los frutos de coco, seleccionando cuidadosamente solo los que estén sanos y maduros para producir aceite de coco de la mejor calidad.
Después de la inspección, los frutos están listos para el proceso de preparación. Esta etapa implica la eliminación de partes externas del fruto de coco como la cáscara, los pelos y la cabeza; liberando así el preciado contenido del coco. También hay que despedazar el coco maduro para liberar el corazón. El corazón es el núcleo donde reside el jugo blanco del coco y es mucho más rico en ácidos grasos, con altos niveles de materia grasa, excelente para extraer aceite.
Cuando se haya preparado la materia prima de los frutos de coco, éstos son prensados manualmente o mecánicamente para separar el aceite y los residuos sólidos. Para realizar el proceso de prensado se pueden usar máquinas prensadoras manuales o mecánicas modernas que generan presiones admibles mantendrán intactos los aceites dietéticos naturales durante el proceso de prensado.
Una vez realizada la extracción del aceite, el aceite crudo obtenido directamente de la prensa debe pasar por varias etapas de limpieza. Primero se aplica calor para remover completamente la humedad. Después, se agrega agua destilada y se filtra para retener los residuos sólidos y otros microorganismos como bacterias, hongos y levaduras. Finalmente, la mezcla se somete a un tratamiento con una solución de álcali para eliminar los ésteres y acidez. El aceite refinado obtenido se ensambla en tanques, ya listo para el envío.
El último paso en la fabricación del aceite de coco consiste en embalar el aceite para su distribución y venta. El aceite se verterá en botellas, frascos, tarros y bombonas de vidrio y plástico con diferentes tamaños y capacidades para satisfacer las demandas comerciales. También pueden agregarse conservantes para ayudar a prolongar la vida útil del aceite. Finalmente el aceite envasado se sella herméticamente y se controla visualmente para asegurar el cumplimiento con la especificación final requerida.
Con la implementación de cualquiera de los sistemas de prensado descritos anteriormente, resultará un aceite de coco de alta calidad. El uso de máquinas prensadoras mejora la producción continua, lo que acelera los procesos de producción y reduce el costo de fabricación. Además, brinda prescripciones técnicas inteligentes que ayudarían a mantener el vigor del aceite. Esto evitará posibles complicaciones relacionadas con el control de la calidad. La naturaleza versátil del aceite de coco también significa que el uso de diferentes tipos de frutos de coco maduros generaría aceites vegetales ligeramente diferentes con sabor y color diferentes.
Se debe prestar especial atención a la calidad de los frutos de coco seleccionados para asegurar la mejor producción de aceite de coco. Si los frutos no son maduros, el contenido de grasa disminuye significativamente y con ello también cae el rendimiento del aceite. Si se siguen estas guías al fabricar aceite de coco a nivel industrial, hay una garantía para obtener aceite de excelente calidad para su venta y consumo.
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